martes, 6 de noviembre de 2018

Santo Rosario

"Recen el Rosario todos los días...Recen, recen mucho y ofrezcan sacrificios por los pecadores...Yo soy Nuestra Señora del Rosario.Solo yo seré capaz de ayudarlos....Finalmente mi Inmaculado Corazón triunfará."
Nuestra Señora de Fátima


La palabra Rosario significa ‘Corona de Rosas’. Nuestra Señora ha revelado a mucha gente que cada vez que ellos dicen un Ave María le dan una hermosa rosa y que cada Rosario completo hace una corona de rosas. La rosa es la reina de las flores, así que el Rosario es la rosa de todas las devociones y por lo tanto es la más importante. El Santo Rosario es considerado como la oración perfecta porque junto con él esta aunada la majestuosa historia de nuestra salvación. Con el Rosario de hecho, meditamos los misterios de gozo, de dolor y de gloria de Jesús y María. Es una oración simple, humilde como María. Es una oración que podemos hacer con ella, la Madre de Dios. Con el Ave María la invitamos a que rece por nosotros. Nuestra Señora siempre nos otorga lo que pedimos. Ella une su oración a la nuestra. Por lo tanto, ésta es más poderosa, porque María recibe lo que ella pide, Jesús nunca dice no a lo que su madre le pide. En cada una de sus apariciones, la bendita Madre nos ha invitado a rezar el Rosario como una arma poderosa encontra del maligno, para traernos la verdadera paz. Tu oración en unión con la de la Virgen María, puedes obtener el regalo de la conversión y cambio de corazones. Cada día, puedes alejar de ti mismo y de tu casa, peligros y maldades.El Papa San Juan Pablo II firmó el 16 de octubre 2002 la Carta Apostólica «Rosarium Virginis Mariae», sobre el Rosario de la Virgen María, en la que introduce cinco nuevos misterios de la luz. Con esta oración se invocará especialmente la paz amenazada en el mundo y en la familia.
El Rosario completo se forma de 20 decenas. Cada decena se reza en honor a cada Misterio que relata la vida de Nuestro Señor y de Su Santa Madre.Es recomendado decir las cinco decenas a la vez mientras se medita sobre los misterios.Cada misterios debe ser meditado ‘cuenta por cuenta’ por cada Ave María de la decena.

Los Misterios del Rosario
GOZOSOS Los lunes y sábados
DOLOROSOS Los martes y viernes
LUMINOSOS Los jueves
GLORIOSOS Los miércoles, y Domingos
Textos de la Sagrada Biblia sacados de www.edesclee.com/biblia-online https://opusdei.org/es-es/article/textos-de-san-josemaria-sobre-los-misterios-del-rosario/
Misterios Gozosos
1° Misterio gozoso - La Anunciación del Ángel a María

26 Al sexto mes* envió Dios el ángel Gabriel a un pueblo de Galilea, llamado Nazaret, 27 a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David. La virgen se llamaba María. 28 Cuando entró, le dijo: «Alégrate*, llena de gracia, el Señor está contigo.» 29Ella se conturbó por estas palabras y se preguntaba qué significaría aquel saludo. 30 El ángel le dijo: «No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios; 31 vas a concebir en tu seno y a dar a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. 32 Él será grande, le llamarán Hijo del Altísimo y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; 33 reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin*.» 34 María respondió al ángel: «¿Cómo será esto posible, si no conozco varón*?» 35 El ángel le respondió: «El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra*; por eso, el que va a nacer será santo y le llamarán Hijo de Dios. 36 Mira, también Isabel, tu pariente, ha concebido un hijo en su vejez y ya está en el sexto mes la que era considerada estéril, 37 porque no hay nada imposible para Dios.» 38 Dijo María: «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.» Y el ángel la dejó y se fue. (Lucas 1, 26-38)

Oh María gracias al Sí Tuyo nos has abierto las puertas del cielo, has aceptado la voluntad del Padre. Serás bendita por siempre: Tu intercesión es escuchada en el cielo porque has aceptado el plan de Dios. Permítenos orar para que seamos capaces de dar el Sí a Dios Padre a cada momento que Él nos lo pida. María ayúdanos a ser mansos y obedientes a la voluntad de Dios.

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío

2° Misterio gozoso - María visita a su prima Santa Isabel

39 En aquellos días, se puso en camino María y se dirigió con prontitud a la región montañosa, a una población de Judá*. 40Entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. 41 En cuanto oyó Isabel el saludo de María, saltó de gozo el niño en su seno; Isabel quedó llena de Espíritu Santo 42 y exclamó a gritos: «Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu seno; 43¿cómo así viene a visitarme la madre de mi Señor*? 44 Porque apenas llegó a mis oídos la voz de tu saludo, saltó de gozo el niño en mi seno. 45 ¡Feliz la que ha creído que se cumplirían las cosas que le fueron dichas de parte del Señor*!»

Cántico de María.

46 Dijo María*:
«Alaba mi alma la grandeza del Señor
47 y mi espíritu se alegra en Dios mi salvador,
48 porque ha puesto los ojos en la pequeñez de su esclava.
Desde ahora, todas las generaciones me llamarán bienaventurada,
49 porque ha hecho en mi favor cosas grandes el Poderoso, Santo es su nombre
50 y su misericordia alcanza de generación en generación a los que le temen.
51 Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los de corazón altanero.
52 Derribó a los potentados de sus tronos y exaltó a los humildes.
53 A los hambrientos colmó de bienesy despidió a los ricos con las manos vacías.
54 Acogió a Israel, su siervo,
acordándose de la misericordia
55 —como había anunciado a nuestros padres— en favor de Abrahán y de su linaje por los siglos.»
56 María se quedó con ella unos tres meses, y luego regresó a su casa*. (Lucas 1, 39-56)

María visita a su prima Isabel: Ella lleva Dios a su prima, por el amor a sus hermanos y vecinos. Señor ayúdanos a llevar a Cristo a otros, como María lo hizo. María permítenos pedirte el regalo hermoso de la caridad.

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío

3° Misterio gozoso - El Nacimiento del Niño Jesús en Belén

 1 Por aquel entonces se publicó un edicto de César Augusto*, por el que se ordenaba que se empadronase todo el mundo. 2 Este primer empadronamiento* tuvo lugar siendo Cirino gobernador de Siria. 3 Todos fueron a empadronarse, cada cual a su ciudad. 4 También José subió desde Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, llamada Belén, por ser él de la casa y familia de David, 5para empadronarse con María, su esposa, que estaba encinta. 6Mientras estaban allí, se le cumplieron los días del alumbramiento 7 y dio a luz a su hijo primogénito*. Lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no tenían sitio en el albergue*.
8 Había en la misma comarca unos pastores, que dormían al raso y vigilaban por turno durante la noche su rebaño. 9 Se les presentó el ángel del Señor; la gloria del Señor los envolvió en su luz y se llenaron de temor. 10 El ángel les dijo: «No temáis, pues os anuncio una gran alegría, que lo será para todo el pueblo: 11 os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un salvador, que es el Cristo Señor*. 12 Esto os servirá de señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre.» 13 De pronto se juntó con el ángel una multitud del ejército celestial que alababa a Dios diciendo:
14 «Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz a los hombres en quienes él se complace*.»
15 Cuando los ángeles los dejaron y se fueron al cielo, los pastores se decían unos a otros: «Vamos a Belén a ver lo que ha sucedido, eso que el Señor nos ha manifestado.» 16 Fueron a toda prisa y encontraron a María y a José, y al niño acostado en el pesebre. 17 Al verlo, contaron lo que les habían dicho acerca de aquel niño; 18 y todos cuantos lo oían se maravillaban de lo que los pastores les decían. 19 María, por su parte, guardaba todas estas cosas y las meditaba en su interior. 20 Los pastores se volvieron glorificando y alabando a Dios* por todo lo que habían oído y visto, tal como se les había anunciado. (Lucas 2, 1-20)

El Niño Jesús en el pesebre. María, José y los pastores le adoran. Permítenos adorar a Cristo, el Hijo de Dios, en el silencio de nuestra alma y en el fondo de nuestro corazón. Permítenos pedirte María que nos hagas amar cada vez más a Jesús y pedir el regalo de la pobreza de espíritu.

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío

4° Misterio gozoso - La presentación de Jesús en el templo

Cuando se cumplieron los días en que debían purificarse, según la Ley de Moisés*, llevaron a Jesús a Jerusalén para presentarle al Señor, 23como está escrito en la Ley del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor24 y para ofrecer en sacrificio un par de tórtolas o dos pichones*, conforme a lo que se dice en la Ley del Señor.
25 Vivía por entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón. Era una persona justa y piadosa, que esperaba que Dios consolase a Israel; y estaba en él el Espíritu Santo.
26 El Espíritu Santo le había revelado que no vería la muerte antes de haber visto al Cristo del Señor*. 27 Movido por el Espíritu, vino al Templo. Cuando los padres introdujeron al niño Jesús, para cumplir lo que la Ley prescribía sobre él, 28 lo tomó en brazos y alabó a Dios diciendo:

Cántico de Simeón*.

29 «Ahora, Señor, puedes, según tu palabra,
dejar que tu siervo se vaya en paz,
30 porque han visto mis ojos tu salvación,
31 la que has preparado a la vista de todos los pueblos,
32 luz para iluminar a las gentes
y gloria de tu pueblo Israel.»

Profecía de Simeón.

33 Su padre y su madre estaban admirados de lo que se decía de él. 34 Simeón los bendijo y dijo a María, su madre: «Éste está destinado para caída y elevación de muchos en Israel, y como signo de contradicción* —35 ¡a ti misma una espada te atravesará el alma!—, a fin de que queden al descubierto las intenciones de muchos corazones*.»

Profecía de Ana.

36 Había también una profetisa*, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser, de edad avanzada. Casada en su juventud, había vivido siete años con su marido, 37 y luego quedó viuda hasta los ochenta y cuatro años. No se apartaba del Templo, sirviendo a Dios noche y día con ayunos y oraciones. 38 Presentándose en aquel mismo momento, comenzó a alabar a Dios y a hablar del niño a todos los que esperaban la redención de Jerusalén*.

39 Así que cumplieron todo lo ordenado por la Ley del Señor, volvieron a Galilea, a su pueblo de Nazaret. 40 El niño crecía, se fortalecía y se iba llenando de sabiduría; y la gracia de Dios estaba sobre él. (Lucas 2, 22-40)
Necesitamos poner atención a la voz de Dios, discernir Su llamada y aceptar la misión que nos dé. Después de la profecía de Simeón, María lleva la herida del sufrimiento en su Corazón, pero en silencio ella acepta la voluntad del Padre.

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío

5° Misterio gozoso - El Niño Jesús es Encontrado en el Templo

41 Sus padres iban todos los años a Jerusalén a la fiesta de la Pascua. 42 Cuando cumplió los doce años, subieron como de costumbre a la fiesta. 43 Pasados aquellos días, ellos regresaron, pero el niño Jesús se quedó en Jerusalén, sin que sus padres lo advirtieran. 44 Creyendo que estaría en la caravana, y tras hacer un día de camino, lo buscaron entre los parientes y conocidos. 45 Pero, al no encontrarlo, se volvieron a Jerusalén en su busca.
46 Al cabo de tres días*, lo encontraron en el Templo sentado en medio de los maestros, escuchándoles y haciéndoles preguntas. 47 Todos cuantos le oían estaban estupefactos, por su inteligencia y sus respuestas. 48 Cuando lo vieron, quedaron sorprendidos; su madre le dijo: «Hijo, ¿por qué nos has hecho esto? Tu padre y yo te hemos andado buscando, llenos de angustia.» 49 Él les dijo: «Y ¿por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo debía estar en la casa de mi Padre*?» 50Pero ellos no comprendieron la respuesta que les dio.
51 Jesús volvió con ellos a Nazaret y vivió sujeto a ellos. Su madre conservaba cuidadosamente todas las cosas en su corazón. 52 Jesús crecía en sabiduría, en estatura y en gracia ante Dios y ante los hombres. (Lucas 2, 41-52)

Pensemos en las veces que hemos estado lejos de Jesús, desde que Jesús, con tanto amor ha muerto por nosotros. Meditemos en que en las dificultades de la vida la única seguridad es encontrar a Jesús y nunca más salir de Su gran amor.

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío


Misterios Luminosos
1° Misterio de la luz - Bautismo de Jesús en el Jordán

Entonces Jesús vino de Galilea al Jordán, a Juan, para ser bautizado por él. 
Pero Juan procuraba Impedírselo diciendo: --Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y Tú vienes a Mí? Pero Jesús le Respondió: --Permítelo por ahora, porque Así nos conviene cumplir toda justicia. Entonces se lo Permitió. 
Y cuando Jesús fue bautizado, en seguida Subió del agua, y he Aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que Descendía como paloma y Venía sobre él. 
Y he Aquí, una voz de los cielos Decía: "Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia." (Mt 3,13-17)

Misterio de luz es ante todo el Bautismo en el Jordán. En él, mientras Cristo, como inocente que se hace 'pecado' por nosotros (cf. 2 Co 5, 21), entra en el agua del río, el cielo se abre y la voz del Padre lo proclama Hijo predilecto (cf. Mt 3, 17 par.), y el Espíritu desciende sobre Él para investirlo de la misión que le espera.

Se reza
Padre Nuestro 10 Ave María              Gloria Oh Jesús mío 

2° Misterio de la luz - las Bodas de Caná

Al tercer Día se Celebró una boda en Caná de Galilea, y estaba Allí la madre de Jesús. Fue invitado también Jesús con sus Discípulos a la boda. Y como Faltó el vino, la madre de Jesús le dijo: --No tienen vino. Jesús le dijo: --¿Qué tiene que ver eso conmigo y contigo, mujer? Todavía no ha llegado mi hora. Su madre dijo a los que Servían: --Haced todo lo que él os diga. Había Allí seis tinajas de piedra para agua, de acuerdo con los ritos de los Judíos para la Purificación. En cada una de ellas Cabían dos o tres medidas. Jesús les dijo: --Llenad de agua las tinajas. Y las llenaron hasta el borde. Luego les dijo: --Sacad ahora y llevadlo al encargado del banquete. Se lo llevaron; y cuando el encargado del banquete Probó el agua ya hecha vino, y no Sabía de Dónde Venía (aunque los sirvientes que Habían sacado el agua Sí lo Sabían), Llamó al novio y le dijo: --Todo hombre sirve primero el buen vino; y cuando ya han tomado bastante, entonces saca el inferior. Pero Tú has guardado el buen vino hasta ahora. 
Este principio de señales hizo Jesús en Caná de Galilea, y Manifestó su gloria; y sus Discípulos creyeron en él. Después de esto, él Descendió a Capernaúm con su madre, sus hermanos y sus Discípulos; y se quedaron Allí no muchos Días. (Gv 2, 1-12)

Misterio de luz es el comienzo de los signos en Caná (cf. Jn 2, 1-12), cuando Cristo, transformando el agua en vino, abre el corazón de los discípulos a la fe gracias a la intervención de María, la primera creyente.

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                Gloria  Oh Jesús mío  

3° Misterio de la luz - el anuncio del Reino de Dios

Después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio de Dios, 
y diciendo: "El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado. ¡Arrepentíos y creed en el evangelio!" (Mc 1, 14-15)

Misterio de luz es la predicación con la cual Jesús anuncia la llegada del Reino de Dios e invita a la conversión (cf. Mc 1, 15), perdonando los pecados de quien se acerca a Él con humilde fe (cf. Mc 2. 3-13; Lc 47-48), iniciando así el ministerio de misericordia que Él continuará ejerciendo hasta el fin del mundo, especialmente a través del sacramento de la Reconciliación confiado a la Iglesia.

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío  

4° Misterio de la luz - La Transfiguración de Nuestro Señor Jesucristo en el Monte Tabor


Aconteció, como ocho Días después de estas palabras, que Tomó consigo a Pedro, a Juan y a Jacobo, y Subió al monte a orar. Y mientras oraba, la apariencia de su rostro se hizo otra, y sus vestiduras se hicieron blancas y resplandecientes. Y he Aquí, dos hombres hablaban con él. Eran Moisés y Elías, quienes aparecieron en gloria y hablaban de su partida, que él iba a cumplir en Jerusalén. Pedro y los otros con él estaban cargados de sueño; pero se mantuvieron vigilando y vieron su gloria y a dos hombres que estaban con él. 
Aconteció que, mientras aquéllos se apartaban de él, Pedro dijo a Jesús, sin saber lo que Decía: --Maestro, nos es bueno estar Aquí. Levantemos, pues, tres enramadas: una para ti, otra para Moisés y otra para Elías. Mientras él estaba diciendo esto, vino una nube y les hizo sombra. Y ellos tuvieron temor cuando entraron en la nube. 
Entonces de la nube Salió una voz que Decía: "Este es mi Hijo, el Escogido. A él Oíd." 
(Luc 9,28-35)

Misterio de luz por excelencia es la Transfiguración, que según la tradición tuvo lugar en el Monte Tabor. La gloria de la Divinidad resplandece en el rostro de Cristo, mientras el Padre lo acredita ante los apóstoles extasiados para que lo « escuchen » (cf. Lc 9, 35 par.) y se dispongan a vivir con Él el momento doloroso de la Pasión, a fin de llegar con Él a la alegría de la Resurrección y a una vida transfigurada por el Espíritu Santo.

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío  

5° Misterio de la luz - la institución de la Eucaristía

Mientras ellos Comían, Jesús Tomó pan y lo bendijo; lo Partió, les dio y dijo: --Tomad; esto es mi cuerpo. Tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio; y bebieron todos de ella. 
Y él les dijo: --Esto es mi sangre del pacto, la cual es derramada a favor de muchos. 
De cierto os digo que no beberé Más del fruto de la vid, hasta aquel Día cuando lo beba nuevo en el reino de Dios. 
(Mc 14,22-25)

Misterio de luz es, por fin, la institución de la Eucaristía, en la cual Cristo se hace alimento con su Cuerpo y su Sangre bajo las especies del pan y del vino, dando testimonio de su amor por la humanidad « hasta el extremo » (Jn13, 1) y por cuya salvación se ofrecerá en sacrificio.

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío

Misterios Dolorosos
1° misterio dolorosos - La Oración de Jesús en Getsemaní

36 Entonces fue Jesús con ellos a una propiedad llamada Getsemaní*, y dijo a los discípulos: «Sentaos aquí, mientras voy allá a orar.» 37Tomó consigo a Pedro y a los dos hijos de Zebedeo, y comenzó a sentir tristeza y angustia. 38 Entonces les dijo: «Mi alma está triste hasta el punto de morir*; quedaos aquí y velad conmigo.» 39 Él se adelantó un poco, cayó rostro en tierra, y suplicaba así: «Padre mío, si es posible, que pase de mí esta copa, pero no sea como yo quiero, sino como quieres tú*.» 40 Volvió después donde los discípulos y los encontró dormidos. Dijo entonces a Pedro: «¿Conque no habéis podido velar una hora conmigo? 41Velad y orad, para que no caigáis en tentación; que el espíritu está pronto, pero la carne es débil.» 42 Y alejándose de nuevo, por segunda vez oró así: «Padre mío, si esta copa no puede pasar sin que yo la beba, hágase tu voluntad.» 43 Volvió otra vez y los encontró dormidos, pues sus ojos estaban cargados. 44 Los dejó y se fue a orar por tercera vez, repitiendo las mismas palabras. 45 Volvió entonces donde los discípulos y les dijo: «Ahora ya podéis dormir y descansar*. Sabed que ha llegado la hora en que el Hijo del hombre va a ser entregado en manos de pecadores. (Mateo 26, 36-45) 39 Salió y, como de costumbre, fue al monte de los Olivos. Los discípulos le siguieron. 40Llegado al lugar, les dijo: «Pedid que no caigáis en tentación.»
41 Se apartó de ellos como un tiro de piedra y, puesto de rodillas*, oraba 42 así: «Padre, si quieres, aparta de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya.» 43 Entonces se le apareció un ángel venido del cielo que le confortaba. 44 Y sumido en agonía, insistía más en su oración. Su sudor se hizo como gotas espesas de sangre que caían en tierra*.
45 Levantándose de la oración, vino donde los discípulos y los encontró dormidos por la tristeza. 46 Les dijo: «¿Cómo es que estáis dormidos? Levantaos y orad para que no caigáis en tentación.» (Lucas 22, 36-46)

En la gran oración al Padre, Jesús encuentra fuerza, confianza y un ángel es enviado a confortarlo. Entonces Jesús es nuestro ángel confortador. Es como Él nos dijo: "Porque se preocupan en las dificultades? Sean fuertes en Mí, miren a su Dios en las horas más dolorosas, y triunfarán." Permítenos encomendarnos a Dios para siempre cumplir Su mandato.

Se reza
Padre Nuestro   10 Ave María                     Gloria   Oh Jesús mío  

2° Misterio doloroso - la flagelación de Jesús

26 Entonces les soltó a Barrabás. Y a Jesús, después de azotarle*, se lo entregó para que fuera crucificado. (Mateo 27, 26)

Cuánto dolor, tormentos y heridas en el cuerpo de Jesús. Cuánta Sangre cayó al suelo, mientras sus verdugos reían, le insultaban, y reunían sus fuerzas para volver a golpear el inocente Cuerpo de Jesus. Permítenos aceptar los insultos por amor a Nuestro Señor y arrepentirnos de nuestros pecados.

Se reza
Padre Nuestro   10 Ave María                     Gloria   Oh Jesús mío  

3° Misterio doloroso - La Coronación de Espinas

27 Entonces los soldados del procurador llevaron consigo a Jesús al pretorio* y reunieron alrededor de él a toda la cohorte. 28 Lo desnudaron y le echaron encima un manto de púrpura*; 29 trenzaron una corona de espinas y se la colocaron en la cabeza, y le pusieron en la mano derecha una caña; después, doblando la rodilla delante de él, le hacían burla, diciendo: «¡Salve, Rey de los judíos*!»; 30 y, tras escupirle, cogieron la caña y le golpeaban en la cabeza. 31 Cuando se hubieron burlado de él, le quitaron el manto, le pusieron sus ropas y lo llevaron a crucificarlo. (Mateo 27, 27-31)

Piensa en la indignación, ofensas, y humillaciones que Jesús sufrió. Lo maltrataron, fué tratado como el culpable de nuestros peores pecados. Parece decirnos "¿Por qué te desesperas cuando sufres? ¿Es esa la manera en que me amas? Medita Mi Pasión y encuentra en ella un rico alimento espiritual." Permítenos pedir el regalo de la paciencia y aceptar todas la humillaciones, pensando como Jesús sufrió por nosotros.

Se reza
Padre Nuestro   10 Ave María                     Gloria   Oh Jesús mío  

4° Misterio doloroso - Jesús con la cruz a cuestas

Cuando lo llevaban, tomaron a un tal Simón de Cirene que volvía del campo, y le cargaron la cruz de Jesús para que la llevara detrás de él. Lo seguí muchísima gente, especialmente mujeres que se golpeaban el pecho y se lamentaban por él. Jesús volviéndose hacia ellas, les dijo: "Hijas de Jerusalén, no lloren por mí. Lloren más bien por ustedes mismas y por sus hijos. Por que va a llegar el día en que se dirá: Felices las madres sin hijos, felices las mujeres que no dieron a luz ni amamantaron. Entonces se dirá: ¡Ojalá que los cerros caigan sobre nosotros! ¡Ojalá que las lomas nos ocultaran! Porque si así tratan al arbol verde, ¿Qué harán con el seco? Junto con Jesús llevaban también a dos malhechores para ejecutarlos. (Lc 23,26-32)

Aún y cuando Jesús hubiera sufrido solo por ti, Jesús hubiera aceptado tales dolores, grande es su amor por ti. A lo largo del camino al Calvario, Jesús ve a su Madre. Podremos imaginarnos el momento cuando sus ojos se encontraron? O cuanto su corazón debió haber sentido dolor. Permítenos pedir María la gracia de siempre aceptar nuestra cruz, para que María y Jesús puedan soportarlo.

Se reza
Padre Nuestro   10 Ave María                     Gloria   Oh Jesús mío  

5° Misterio doloroso - La Muerte y Crucifixión de Nuestro Señor Jesucristo

Junto a la cruz de Jesús estaba su madre y la hermana de su madre, y también María, esposa de Cleofás, y María de Magdala. Jesús al ver a la madre y junto a ella a su discípulo más querido, dijo a la Madre: "Mujer, ahí tienes a tu hijo." Después dijo al discípulo: "Ahí tienes a tu madre." Desde ese momento el discípulo se la llevó a su casa. (Jn 19,25-27)

Jesús desea vernos cerca de María, su Madre, Él desea que, como niños, mantegamos nuestra mano unida a la de María. Esto es lo que el quiere. El nos pide que nos encomendemos a la Virgen María. El nos pide reconocer a Nuestra Señora como Nuestra Madre, quién encenderá en nosotros un amor ferviente a su hijo. María, nosotros creemos en ti, tómanos y llévanos al refugio de tu Inmaculado Corazón, alivia nuestra soberbia con tu humildad, que es la que nos aparta de Dios.

Se reza
Padre Nuestro   10 Ave María                     Gloria   Oh Jesús mío

Misterios Gloriosos
1° Misterio glorioso - La Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo

Pasado el Sábado, al despertar el alba del primer día de la semana, fueron María Magdalena y la otra María a visitar el sepulcro. De repente, se produjo un gran temblor: el Angel del Señor bajó del cielo y, llegando al sepulcro, hizo rodar la piedra que lo tapaba y se sentó encima. Su aspecto era como el relámpago y sus ropas blancas como la nieve. Al verlo, los guardias temblaron de miedo y quedaron como muertos. El Angel dijo a las mujeres: "Ustedes, no teman, porque yo sé que buscan a Jesús crucificado. No está aquí. Ha resucitado tal como lo había anunciado." ( Mat 28,1-6)

Jesús resucitado ha probado que el hombre junto a él tiene poder sobre el pecado y sobre la muerte. Jesús, ayúdanos a resucitar, sálvanos del pecado, del enemigo, dános Tu luz, dános Tu Alegría. Reaviva en nosotros el amor, la fé, la esperanza, y el regalo de la oración. Permítenos pedir a la Virgen María una fe inquebrantable.


Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío  

2° Misterio glorioso - La Ascención de Jesús al Cielo
Mientras estaban hablando de todo esto, Jesús se presentó en medio de ellos. Les dijó: "Paz a ustedes." Estaban atónitos y asustados, pensaron que veían a algún espíritu. Pero les dijo: "Por qué se asustan tanto, y porque les vienen estas dudas? Miren mis manos y mis pies, soy yo. Tóquenme y fíjense bien que un espíritu no tiene carne ni huesos, como ustedes ven que yo tengo." Y al mismo tiempo les mostró sus manos y sus pies. Y como en medio de tanta alegría no podían creer y seguían maravillados, les dijo: "¿Tienen aquí algo que comer?" Ellos le ofrecieron un pedazo de pescado asado y él lo tomó y comió ante ellos. Jesús les dijo: "Todo esto se lo había dicho cuando estaba todavía con ustedes. Tenía que cumplirse lo que está escrito en la Ley de Moisés, en los Salmos, y en los Profetas respecto a mí." Entonces les abrió la mente para que lograrán entender las Escrituras y les dijo: "Esto estaba escrito: los sufrimientos de Cristo, su resurrección de entre los muertos al tercer día y la predicación que ha de hacerse en su nombre a todas las naciones, comenzando por Jerusalén, invitándoles a que se conviertan y sean perdonadas de sus pecados. Y ustedes son testigos de todo esto. Ahora yo voy a enviar sobre ustedes al que mi Padre prometió. Por eso, quédense en la ciudad hasta que hayan sido revestidos de la fuerza que viene de arriba." Jesús los condujo hasta cerca de Betania y, levantando las manos, los bendijo. Y mientras los bendecía se alejó de ellos y fué llevado al cielo. (Lucas 24,36-51)

Jesús, no has abandonado a Tus apóstoles en la agonía, y les has otorgado el gozo de contemplarte ‘glorificado' durante 40 días. Después de tu Ascención, gratificas a aquellos que te buscan al recibir la Eucaristía. Através de María nosotros creemos en ti. María otórganos el regalo de la esperanza.

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío  

3° Misterio glorioso - La Venida del Espíritu Santo

Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en un mismo lugar. De pronto vino del cielo un ruido, como el de una violenta ráfaga de viento, que llenó toda la casa donde estaban. Se les aparecieron unas lenguas como de fuego, las que, separándose, se fueron posando sobre cada uno de ellos; y quedaron llenos del Espíritu Santo y se pusieron a hablar idiomas distintos, en los cuales el Espíritu les concedía expresarse. (Hechos 2,1-4)
Jesús, infúndenos con el Consolador, El Espíritu Santo, enciéndenos con la Luz de tu Espíritu, con su fuerza nos penetre hasta el fondo de nuestro corazón y alivie nuestras penas. Envíanoslo para que llene nuestros corazones con tu amor. Háznos apóstoles tuyos, amado Señor. Virgen María permítenos el regalo del verdadero amor y el regalo de la oración del corazón. "Ven Espíritu Santo, Ven a nosotros por medio de la intercesión del Inmaculado Corazón de María, tu bien amada esposa." .

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío  

4° Misterio glorioso - La Asunción a los Cielos de la Bienaventurada Virgen María en cuerpo y alma

Ozías por su parte dijo a Judit: "Hija mía, que Dios Altísimo te bendiha más que a todas las mujeres de la tierra. Y ¡bendito sea el Señor, Dios, Creador del cielo y de la tierra, que te condujo para que cortaras la cabeza del jefe de nuestros enemigos! Jamás los hombres olvidarán la confianza que has demostrado. Siempre recordarán el poder de Dios. Que Dios te colme de bienes y que los hombres te glorifiquen, pues no vacilaste en exponer tu vida al ver la humillación de nuestra raza. Por tu perfecta sumisión a Dios has alejado la ruina que nos esperaba." Todo el pueblo respondió: Amén. (Jdt 13,18-20; 15,10)

Ahora que María es llevada al cielo, ella pide por sus hijos e hijas, ésos hijos e hijas que Jesús puso en sus manos cuando Él estaba en la cruz. María, ruega por nosotros, sabes nuestros temores, llévanos a tu corazón, corazón de madre. Ruega por nosotros ahora y en la hora de nuestra muerte llévanos contigo al cielo. Te pedimos una devoción a tu Inmaculado Corazón que será nuestro refugio en nuestras tribulaciones.


Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío  

5° Misterio glorioso - La Coronación de la Santísima Virgen María como Reina y Señora del Cielo y de la Tierra

Apareció en el cielo una señal grandiosa: una Mujer, vestida del sol, con la luna bajo los pies y en su cabeza una corona de doce estrellas. Esta embarazada y grita de dolor, porqué llegó su tiempo de dar a luz. (Apo ,1)

María permítenos llamarte, permítenos amarte, permítenos confiar en ti, porque te nos has dado. Te tenemos como madre en el cielo que también eres Reina; así que nosotros necesitamos avocarnos a ella con una fé inmensa y esperanza. Si pedimos algo mientras rezamos el Santo Rosario, nos será otorgado. Pídele el regalo de la oración, una oración de corazón, dilo solo por amor, una amor por ella y por Jesús. También permítenos pedir por la perseverancia de la oración, para estar siempre unidos a tu corazón y por lo tanto al corazón de Jesús.

Se reza
Padre Nuestro  10 Ave María                    Gloria  Oh Jesús mío  

la Santísima Virgen ha dado una nueva eficacia  a la recitación del Santo Rosario en estos últimos tiempos que ahora vivimos.  Ella ha dado esta eficacia de tal modo que no hay problema alguno, no importando que tan difícil sea, ya si sea temporal o sobre todo, espiritual, en la vida personal de cada uno de nosotros, de nuestras familias, de las familias del mundo, o de las comunidades religiosas, o aun de las vidas de las personas y de las naciones, que no pueda ser resuelto por el Rosario.  No hay problema alguno, le digo, no importando que tan difícil sea, que no sea resuelto por la oración del Santo Rosario.

Sor Lucia dos Santos


Las Quince Promesas de la Virgen María a quienes recen el Rosario

1 Aquellos que recen con enorme fé el Rosario recibirán gracias especiales.
2. Prometo mi protección y las gracias mas grandes a aquellos que recen el Rosario.
3. El Rosario es una arma poderosa para no ir al infierno, destruirá los vicios, disminuirá los pecados, y defendernos de las herejías.
4. Se otorgará la virtud y las buenas obras abundarán, se otorgará la piedad de Dios para las almas, rescatará a los corazones de la gente de su amor terrenal y vanidades, y los elevará en su dedeo por las cosas eternas. Las mismas almas se santificarán por este medio.
5. El alma que se encomiende a mi en el Rosario no perecerá.
6. Quien rece el Rosario devotamente, y lleve los misterios como testimonio de vida no conocerá la desdicha. Dios no lo castigará en su justicia, no tendrá una muerte violenta, y si es justo, permanecerá en la gracia de Dios, y tendrá la recompensa de la vida eterna.
7. Aquel que sea verdadero devoto del Rosario no perecerá sin los Sagrados Sacramentos.
8. Aquellos que recen con mucha fe el Santo Rosario en vida y en la hora de su muerte encontrarán la luz de Dios y la plenitud de su gracia, en la hora de la muerte participarán en el paraíso por los méritos de los Santos.
9. Libraré del purgatorio a aquienes recen el Rosario devotamente.
10. Los niños devotos al Rosario merecerán un alto grado de Gloria en el cielo.
11. Obtendrán todo lo que me pidan mediante el Rosario.
12. Aquellos que propaguen mi Rosario serán asistidos por mí en sus necesidades.
13. Mi hijo me ha concedido que todo aquel que se encomiende a mi al rezar el Rosario tendrá como intercesores a toda la corte celestial en vida y a la hora de la muerte.
14. Son mis niños aquellos que recitan el Rosario, y hermanos y hermanas de mi único hijo, Jesus Cristo.
15. La devoción a mi Rosario es una gran señal de profecía.
Las bendiciones del Rosario

1. Los pecadores son perdonados.
2. Las almas sedientas son refrescadas.
3. Aquellos que son soberbios encuentran la sencillez.
4. Aquellos que sufren encontrarán consuelo.
5. Aquellos que estan intranquilos encontrarán paz.
6. Los pobres encontrarán paz.
7. Los religiosos son reformados.
8. Aquellos que son ingnorantes serán instruídos.
9. Los vivos aprenderán a sobrepasar el orgullo.
10. Los muertos (las almas santas) aliviarán sus dolores por privilegios.

Los beneficios del Rosario

1. Nos otorga gradualmente un conocimiento completo de Jesus Cristo.
2. Purifica nuestras almas, lavando nuestras culpas.
3. Nos da la victoria sobre nuestros enemigos.
4. Nos facilita practicar la virtud.
5. Nos enciende el amor a Nuestro Señor.
6. Nos enriquece con gracias y meritos.
7. Nos provee con lo necesario para pagar nuestras deudas a Dios y a nuestros familiares cercanos, y finalmente, se obtiene toda clase de gracia de nuestro Dios todopoderoso.


Indulgencias

Enchiridion indulgentiarum (Rosarii marialis recitatio)

La indulgencia es la remisión ante Dios de la pena temporal por los pecados, ya perdonados, en cuanto a la culpa, que un fiel dispuesto y cumpliendo determinadas condiciones consigue por mediación de la Iglesia, la cual, como administradora de la redención, distribuye y aplica con autoridad el tesoro de las satisfacciones de Cristo y de los santos."
"La indulgencia es parcial o plenaria según libere de la pena temporal debida por los pecados en parte o totalmente."
"Todo fiel puede lucrar para sí mismo o aplicar por los difuntos, a manera de sufragio, las indulgencias tanto parciales como plenarias."
"Se confiere una indulgencia plenaria si el Santo Rosario se reza en una iglesia o un oratorio público o en familia, en una comunidad religiosa o asociación pía; se otorga una indulgencia parcial en otras circunstancias", (Enchiridion de Indulgencias, p. 67).


La Iglesia concede indulgencia plenaria, una vez al día, al que rece una tercera parte del Rosario en una Iglesia, en un oratorio público, en familia o en una comunidad religiosa o asociación piadosa.

La Iglesia también concede una indulgencia parcial por cada una de las Avemarías que se rezan durante el Rosario.

Condiciones necesarias para obtener las indulgencias:
1) Que se recen las cinco decenas del Rosario sin interrupción.
2) Que las oraciones sean recitadas y los misterios meditados.
3) Si el Rosario es público, los Misterios deben ser anunciados.
Haber realizado en ese día: Confesión Sacramental, Comunión Eucarística, Oraciones por las intenciones del Papa.



CARTA APOSTÓLICA

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Viva Cristo Rey de Misericordia